I-10. - COLITIS ULCEROSA Y CITOMEGALOVIRUS. ESTUDIO CLÍNICOpATOLÓGICO
1Servicio de Medicina Interna, 2Servicio de Anatomía Patológica. Hospital Universitario de Salamanca. Hospital Clínico. Salamanca.
Objetivos: El propósito de este trabajo fue describir las características de los pacientes ingresados por colitis ulcerosa (CU) en el Hospital Universitario de Salamanca (HUS), así como la revisión de los métodos diagnósticos histopatológicos usados en la búsqueda de infección por citomegalovirus (CMV).
Métodos: Estudio retrospectivo de todos los pacientes diagnosticados de colitis ulcerosa (CIE 9: 556) durante el periodo 2008-2013 en el HUS.
Resultados: Se estudiaron un total de 101 pacientes. La media de edad fue de 44 años (± 16) mientras que la distribución por sexos fue similar en ambos grupos. La extensión de la enfermedad se evaluó mediante colonoscopia (según la clasificación de Montreal), hallándose que un total de 60 pacientes (59,4%) presentaban una afectación limitada al recto-sigma (estadio E1, proctitis ulcerosa) Otros 14 (13,9%), una afectación hasta el ángulo esplénico (estadio E2, colitis izquierda) y los 27 últimos (26,7%), una afectación que sobrepasaba este ángulo (estadio E3, colitis extensa o pancolitis). En el momento del ingreso, a sólo 24 pacientes se le realizó serología para CMV. La inmunoglobulina Ig G fue positiva en 18 de ellos. No hubo ningún resultado IgM positivo. El estudio histológico, con las muestras teñidas en hematoxilina-eosina, se realizó en todos los pacientes. En ningún caso fue posible la observación de células con inclusiones de CMV. En 31 pacientes, se efectuó la técnica de inmunohistoquímica (IHQ), sin encontrar tampoco resultados positivos. La técnica de la reacción en cadena de la polimerasa (PCR) para CMV, se realizó en las muestras de tejido obtenido de 9 pacientes (un 4% del total de la muestra estudiada). Cuatro casos (44%) fueron positivos para CMV. Sin embargo, este hallazgo no fue replicado en estudios histopatológicos e inmunohistoquímicos previos ni posteriores.
Discusión: La enfermedad gastrointestinal por CMV debe sospecharse en cualquier paciente con síntomas gastrointestinales que tenga un alto riesgo de padecer una enfermedad por CMV (inmunodepresión, neoplasia...). En los casos en los que coexisten la colitis ulcerosa y alteraciones histológicas por CMV, no se conoce con seguridad si es el virus quién causa la enfermedad o bien si se localiza en áreas de inflamación preexistente. La presencia de células con inclusiones de CMV en la mucosa de la muestra biópsica teñida con hematoxilina-eosina, es considerada el “Gold Standard” para el diagnóstico de la enfermedad gastrointestinal por CMV. Sin embargo, se han desarrollado diferentes técnicas inmunohistoquímicas con el fin de mejorar la sensibilidad y especificidad de esta prueba. Algunos autores afirman que la IHQ es positiva cuando el análisis histopatológico rutinario no es capaz de hallar células con inclusiones de CMV. Asimismo, esta técnica podría ser más útil en aquellas muestras en las que apenas existen inclusiones (infección por CMV temprana o focal). La técnica de la PCR ha sido utilizada para identificar el DNA del CMV en tejido. Estudios iniciales han mostrado una mayor sensibilidad y, al menos, igual especificidad que las técnicas de histología. Sin embargo, es una técnica conocida por su alta tasa de falsos positivos (del 20 al 40% según la serie de casos estudiada).
Conclusiones: En nuestra serie de casos estudiada, no se consigue establecer una relación directa entre CMV y CU. Al igual que en la literatura revisada, no encontramos ningún caso positivo por IHQ o PCR en pacientes en los que no se han encontrado células con CMV en el examen histológico. Se comprueba que la técnica de la PCR posee un alto índice de falsos positivos, siendo el estudio histopatológico la técnica preferida para el diagnóstico de la enfermedad gastrointestinal por CMV.