234 - FENOTIPACIÓN POS-COVID-19 EN PACIENTES DE EDAD AVANZADA TRAS EL ALTA HOSPITALARIA
1UGC Medicina Interna. Hospital Regional Universitario de MÁlaga. Instituto de InvestigaciÓn BiomÉdica de MÁlaga (IBIMA). MÁlaga. 2CIBER- FisiopatologÍa de la obesidad y la nutriciÓn. Instituto de Salud Carlos III. Madrid.
Objetivos: El 11 de marzo de 2020, la OMS reconoció la infección por SARS-CoV-2 y su enfermedad (COVID-19) como una nueva pandemia. La población de edad avanzada ha sido uno de los principales grupos de riesgo frente esta infección viral y presenta secuelas posCOVID-19, remanentes tras la infección. Nuestro objetivo fue caracterizar las secuelas de la infección por SARS-CoV-2 a nivel analítico, funcional y sintomatológico en población de edad avanzada tras 3 meses del alta hospitalaria.
Métodos: 42 pacientes de edad avanzada con PCR+ confirmatoria de su infección por SARS-CoV-2 e ingresados en la Unidad de Gestión Clínica (UGC) de Medicina Interna del Hospital Regional de Málaga, fueron seguidos en la consulta monográfica posCOVID-19 de dicha UGC tras 3 meses del alta hospitalaria. Parámetros analíticos, funcionales y sintomáticos fueron analizados como síndrome pos-COVID-19.
Resultados: 21 hombres y 21 mujeres (p = 1,00) participaron en este estudio. La edad media de los pacientes fue de 76 ± 9 años. La comorbilidad más frecuente al ingreso fue la hipertensión arterial (82,9%) y fueron tratados principalmente con hidroxicloroquina (87,8%) y azitromicina (85,4%) para la infección. Tras 3 meses del alta hospitalaria encontramos una normalización de los parámetros analíticos, un aumento significativo tanto del grado de dependencia (+15%) como de fragilidad (20,5%), así como un aumento en el número de comorbilidades (94,8%) asociadas. Por otro lado, las secuelas persistentes más frecuentes fueron la astenia (50,0%), la pérdida de peso (43,6%) y la disnea (35,7%).
Conclusiones: La infección por SARS-CoV-2 ha provocado en los pacientes de edad avanzada afectos por COVID-19 importantes secuelas que condicionan su calidad de vida. Tras 3 meses del alta hospitalaria, esta población registra un aumento de su nivel de dependencia, fragilidad y otras complicaciones clínicas. Es fundamental una exhaustiva identificación de las secuelas pos-COVID-19 para reducir la morbimortalidad de la población mediante la prevención y/o el tratamiento de las mismas.