1058 - OFTALMOPATÍA DE GRAVES Y TRATAMIENTO INMUNOSUPRESOR, ESTUDIO DESCRIPTIVO
Hospital Universitario Juan Ramón Jiménez, Huelva, España.
Objetivos: Analizar en pacientes con oftalmopatía de Graves (OG) la respuesta al tratamiento inmunosupresor basándonos en la actividad inflamatoria objetivada mediante resonancia magnética (RM) y analizar la relación entre los resultados de hormonas tiroideas y los hallazgos de dicha actividad inflamatoria.
Métodos: Estudio descriptivo, retrospectivo de pacientes de nuestro centro hospitalario que se incluyeron 12 pacientes con OG tratados en el periodo de 2019 a 2022 que habían sido derivados a consultas de Medicina Interna por falta de respuesta al tratamiento con corticoides y selenio. Se estudiaron datos demográficos, hábitos tóxicos, tratamiento médico/quirúrgico, respuesta inflamatoria mediante RM y la presencia de alteraciones analíticas.
Resultados: De los 12 pacientes incluidos, el 83,3% eran mujeres, el 66,66% eran fumadores y el 91,66% eran pacientes que presentaban estabilidad analítica en cuanto a la función tiroidea a pesar de la actividad inflamatoria de la oftalmopatía hallada en RM. La primera opción terapéutica tras los corticoides fue el uso del micofenolato, administrándose a 9 de los 12 pacientes, de los cuales 7 recibieron una dosis de 1 gramo diario (6 de ellos se objetivó disminución inflamatoria en la RM) y 2 de ellos 2 gramos diarios en los que subjetivamente mejoró la clínica sin apreciarse cambios en la resonancia. El siguiente escalón fue el uso de tocilizumab, administrado al 25% de los pacientes estudiados (16,6% no habían respondido previamente al tratamiento con micofenolato de 2 gramos), 1 de ellos además se le realizó una tiroidectomía y el resto está en seguimiento en consultas (no se ha apreciado remisión completa, aunque si se objetiva disminución de la actividad inflamatoria). Por último, no se observaron reacciones adversas o intolerancias en los pacientes tratados con micofenolato ni con tocilizumab.
Discusión: La OG es la principal manifestación extratiroidea de la enfermedad de Graves, la incidencia en mujeres es de 3,3 a 8 por cada 100,000 cada año y en hombres de 0,9 a 1,6. El tabaco es un riesgo modificable en estos pacientes, aumenta la incidencia, debido a que se asocia a una respuesta menor a los tratamientos inmunosupresores. El tratamiento con micofenolato modula la inflamación de los tejidos, ha demostrado superioridad en comparación a los corticoides en cuanto a seguridad además de una disminución del exoftalmos, actividad inflamatoria y recaídas.
Conclusiones: El principal perfil de paciente observado es el de mujer y fumadora. Podemos afirmar la respuesta de micofenolato en un alto porcentaje, objetivándose una disminución de la actividad inflamatoria. A pesar de la estabilidad analítica en cuanto a la función tiroidea de nuestros pacientes con la enfermedad de Graves, no parece existir relación entre esta y la presencia de oftalmopatía.
Bibliografía
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