793 - EVOLUCIÓN EPIDEMIOLÓGICA DE LOS PACIENTES INGRESADOS POR COVID-19 EN LA UNIDAD DE MEDICINA INTERNA
Medicina interna, Hospital Universitario Virgen de Valme, Sevilla.
Objetivos: Comparar las características clínicas y epidemiológicas de la población ingresada por COVID-19 en la unidad de Medicina Interna en diferentes olas de la pandemia antes del impacto de la vacunación.
Métodos: Se realizó un estudio descriptivo y retrospectivo de los pacientes ingresados por COVID-19 desde el inicio de la pandemia al 31 de enero de 2021 en el servicio de Medicina Interna. Se dividió a la población en dos grupos (primera ola, desde el 14 de marzo hasta finales de mayo de 2020, y, segunda ola, desde finales de agosto de 2020 al 31 de enero de 2021). Se realizó un seguimiento de los pacientes hasta la fecha de finalización de hospitalización o hasta la fecha de fallecimiento si este se hubiera producido previamente. Se usaron las pruebas χ2 (ji al cuadrado) para comparar variables cualitativas y el test estadístico T de Student para variables cuantitativas. Se realizó un test de regresión logística para el análisis multivariante.
Resultados: Los pacientes con COVID-19 que ingresaron en MIN durante el período de estudio fueron 539. De ellos, 262 (48,6%) eran varones con una mediana para la edad de 75 (64-83) años. Los pacientes ingresados en la primera ola fueron de mayor edad, más dependientes, y con mayor comorbilidad que los pacientes ingresados durante la segunda ola (p < 0,001). Se observó una mayor proporción de ingresados en la primera ola procedentes de centros sociosanitarios [32 (36,8%) vs. 34 (7,5%), p < 0,001] y una mayor duración en la estancia media [11 (6-16) vs. 8 (5-12) días, p < 0,001], respectivamente. Respecto a las variables analíticas, la velocidad de sedimentación glomerular y la LDH fueron las únicas variables que mostraron diferencias entre ambos grupos, con una mayor elevación en los pacientes ingresados en la primera ola. En cuanto al tratamiento, en la primera ola los fármacos más usados fueron hidroxicloroquina, antivirales y corticoides con 73 (83,9%), 35 (40,2%) y 39 (44,8%) pacientes tratados respectivamente. El 11,5% de los individuos de la primera ola recibieron inmunomoduladores. Por el contrario, en la segunda ola, no se usó la hidroxicloroquina, el 1,3% fue tratado con antivirales, mientras que destacaron los corticoides e inmunomoduladores, empleados en 415 (92%) y 210 (48,7%) de los pacientes ingresados. Durante el estudio, 36 (6,7%) requirieron intubación [ 12 (13,8%) vs. 24 (5,3%), p = 0,004] (fig.).
Conclusiones: A lo largo de la pandemia, las características epidemiológicas de la población se han modificado, con una edad más joven de la población ingresada, mayor porcentaje de varones, mejor estado funcional y menor comorbilidad. El uso de los tratamientos antivirales disminuyó en la segunda ola, a diferencia del tratamiento con corticoides e inmunomoduladores. Estos factores pudieron haber impactado en una mejor evolución clínica de los pacientes antes del uso masivo de las vacunas.
