T-048 - ANÁLISIS DE LA PRÁCTICA DE PROFILAXIS PARA ENFERMEDAD TROMBOEMBÓLICA VENOSA EN PACIENTES HOSPITALIZADOS CON CIRROSIS HEPÁTICA
Servicio de Medicina Interna. Xerencia de Xestión Integrada de Vigo. Vigo (Pontevedra).
Objetivos: Tradicionalmente se ha considerado a los pacientes con cirrosis hepática avanzada como portadores de un estado de “autoanticoagulación”. Sin embargo, estudios recientes han mostrado que ello no es correcto y pueden desarrollar eventos trombóticos venosos, especialmente trombosis portal (TP) además de estar expuestos a eventos hemorrágicos graves por su coagulopatía y complicaciones de la cirrosis, como las varices esofágicas. El objetivo de este estudio es examinar las prácticas sobre profilaxis de la ETV en pacientes ingresados a causa de cirrosis hepática avanzada.
Métodos: En un hospital terciario, se identificaron todos los pacientes dados de alta en 2014 con el diagnóstico principal de cirrosis hepática (Categoría CIE 9MC: 571.xx; Enfermedad hepática y cirrosis crónica). Se encontraron 356 pacientes de los cuales se seleccionaron al azar las primeras hospitalizaciones de 100 pacientes para el análisis de los datos epidemiológicos, clínicos, de tratamiento y evolución (mediana de seguimiento: 12 meses).
Resultados: De los 100 pacientes con cirrosis avanzada (mediana: 8 de la clasificación Child-Pugh), el 67% eran varones con una edad media de 63 años (DE ± 13). En el 56% de casos la etiología era enólica, en 23% vírica, en 13% mixta y en 8% de otras etiologías. En el 22% se hallaba presente un hepatocarcinoma (HPC). Un 3% habían presentado ETV previa. El 54% presentaban varices esofágicas. El 10% presentaba o se le diagnosticó en el ingreso de ETV [TP: 9 pacientes, trombosis mesentérica: 1 paciente]. Con respecto a los datos analíticos de coagulación en el 86% se observaba un INR < 1,7; la mediana del TTPA fue: 36 sg, y la media de plaquetas fue: 113.000 (DE ± 67.865). La creatinina media fue: 1,1 mg/dl (DE ± 0,9). En el 30% de casos la albúmina era < 2 mg/dl, y en 16% 2,1-3,0 mg/dl. Las complicaciones hemorrágicas fueron el motivo de ingreso en el 20% [en 15 casos por hemorragia digestiva alta (HDA)]. El 16% recibían antiagregación o anticoagulación en el momento de ingreso. El 46% recibió heparina de bajo peso molecular (HBPM). Excepto 1 caso (enoxaparina 80 mg/día) todos recibieron HBPM a dosis profilácticas [43 casos: enoxaparina (20-60 mg/día); 2 casos: bemiparina: (3.500 UI)]. En 6 pacientes presentaron HDA durante el ingreso, pero no hubo mayor hemorragia en tratados con HBPM (2 pacientes con HBPM, 4 sin HBPM). Durante el ingreso el 23% desarrolló encefalopatía hepática. El 42% presentó algún proceso infeccioso al ingreso o durante el mismo [abdominal (15 casos, de ellos 5 fueron peritonitis bacteriana espontánea); respiratorio (14 casos) y urinario (14 casos)]. La estancia media hospitalaria fue de 16,4 días (DE ± 23,9) y la mortalidad intrahospitalaria del 14%. De los 10 pacientes diagnosticados de ETV en 4 se prescribió profilaxis al alta (enoxaparina 40 mg). De los 6 pacientes sin profilaxis 2 sobrevivieron más de un año (1 con TP, 1 con trombosis mesentérica). Ninguno de los pacientes con TP y HPC (4 casos), sobrevivió más de un año. La mortalidad global al año fue del 39%.
Discusión: En nuestro centro recibieron tromboprofilaxis con HBPM el 46% de pacientes con cirrosis hepática avanzada. Esta cifra duplica el 24% objetivado en un único trabajo hallado que ha abordado tal tema (Aldawood et al. Thrombosis J. 2011;9:1-6). No se objetivó mayor tasa de sangrado en los pacientes que recibieron HBPM. La supervivencia de pacientes con HPC y TP fue nula al cabo de un año.
Conclusiones: En nuestro centro aproximadamente la mitad de pacientes con cirrosis hepática avanzada recibe tromboprofilaxis. No hay mayores complicaciones hemorrágicas en quienes reciben dicha tromboprofilaxis con HBPM. A pesar de un diagnóstico de ETV, fundamentalmente TP, la profilaxis al alta sólo se prescribió en el 40%. Los pacientes con TP y HPC no se benefician de dicha profilaxis.