837 - CARACTERÍSTICAS CLÍNICAS Y RIESGO DE HEMORRAGIAS EN PACIENTES CON TEP EN UN CENTRO DE SEGUNDO NIVEL EN 2022
Complejo Asistencial de Zamora, Zamora, España.
Objetivos: Nuestro estudio tuvo dos objetivos principales: describir las características clínicas y demográficas de los pacientes ingresados por tromboembolismo pulmonar (TEP) en nuestro servicio durante el año 2022; y analizar estadísticamente la relación entre la presencia de hemorragias y otros parámetros, incluyendo tratamiento anticoagulante, sexo, edad, presencia de factores de riesgo y exitus.
Métodos: Se analizó una muestra de 14 pacientes. Se recogieron datos demográficos, clínicos y de tratamiento, abarcando 17 variables (tabla) y posteriormente se realizó cálculo de análisis estadístico con SPSS® mediante test de Fischer, analizando la relación entre la presencia de hemorragias y el resto de las variables.
Resultados: La edad media de los pacientes fue de 80 años. La distribución por sexo fue equitativa, con 7 hombres y 7 mujeres. Ningún paciente fue evaluado con escala de probabilidad (Wells) al ingreso, con una puntuación media de 1,07. La duración media del tratamiento fue de 3,7 meses, con un rango de 0 a 12. Ningún paciente presentó factores de riesgo fuertes; sin embargo, 11 pacientes (78,57%) tuvieron factores de riesgo moderados y 10 pacientes (71,43%) factores de riesgo leves. Además, 9 pacientes (64,29%) tenían más de un factor de riesgo moderado y 8 (57,14%) más de un factor de riesgo leve. Respecto al D-dímero, doce pacientes (85,7%) tuvieron un nivel de D-dímero mayor de 600. EL 92,9% no tenía antecedentes de tromboembolismo y el 92,9% de los eventos no fueron provocados. Solo un paciente presentó neoplasia activa (7,1%). Los tipos de tratamiento administrados fueron: 7 pacientes (50%) antivitamina K, 3 pacientes (21,4%) heparina de bajo peso molecular y 4 pacientes (28,6%) ACOD. No se registraron recidivas durante el año posterior. Cinco pacientes (35,7%) presentaron hemorragias, siendo las más comunes las intracraneales y digestivas. Cuatro pacientes fallecieron, dos por el episodio (14,3%) y dos posteriormente.
Discusión: El análisis estadístico no encontró relaciones significativas entre el tipo de tratamiento y la ocurrencia de hemorragias (p = 0,326). No hubo diferencias significativas en la edad entre pacientes con y sin hemorragias (t = −0,317, p = 0,764), ni entre el sexo y el tipo de hemorragia (p = 0,1718). Tampoco se encontró una relación significativa entre el tipo de tratamiento y el exitus (p = 0,0919), aunque el valor p estuvo cerca del umbral de significancia. No se halló una relación significativa entre el número de factores de riesgo moderados y la presencia de hemorragias (p = 0,76).
Conclusiones: No se encontraron relaciones significativas entre el tipo de tratamiento anticoagulante y la ocurrencia de hemorragias, ni entre los factores de riesgo moderados y la misma. Además, no hubo diferencias significativas en la edad y el sexo de los pacientes con y sin hemorragias, ni una asociación significativa entre el sexo y el tipo de hemorragia. Finalmente, el tipo de tratamiento no estuvo significativamente asociado con el exitus. Estos hallazgos sugieren que, en esta muestra específica, los factores demográficos y el tipo de tratamiento no son determinantes significativos para la ocurrencia de hemorragias o el exitus en pacientes con TEP. Sin embargo, destacamos el escaso tamaño de la muestra para obtener conclusiones extrapolables.