EA-35. - ANTICOAGULACIÓN ORAL EN PACIENTES CON ENFERMEDADES MEDICAS NO NEOPLÁSICAS EN FASE TERMINAL Y FIBRILACIÓN AURICULAR
1Servicio de Medicina Interna. Hospital Royo Villanova. Zaragoza. 2Servicio de Medicina Interna. Complejo Hospitalario Virgen del Rocío. Sevilla. 3Servicio de Medicina Interna. Hospital de la Agencia. Valenciana de Salud Vega Baja. Orihuela. Alicante. 4Servicio de Medicina Interna. Hospital de la Serranía. Ronda. Málaga. 5Servicio de Medicina Interna. Hospital Virgen del Camino. Sanlúcar de Barrameda. Cádiz. 6Servicio de Medicina Interna. Hospital Central de la Cruz Roja San José y Santa Adela. Madrid.
Objetivos: Determinar los factores asociados con la supervivencia y con el uso de anticoagulantes orales (ACO) en pacientes con enfermedades médicas no neoplásicas avanzadas en fase terminal y fibrilación auricular (FA).
Métodos: Se estudiaron los pacientes con enfermedades médicas no neoplásicas avanzadas en fase terminal y FA incluidos en el estudio PALIAR. El estado terminal se definió con los criterios de la NHO. Se recogieron los siguientes datos: edad, sexo, residencia, tipo de enfermedad avanzada, fármacos utilizados, índice de Barthel, puntuación CHADS2, síntomas de enfermedad avanzada (caquexia definida como IMC < 20, ingesta oral alterada, edemas, delirium, disnea, úlceras por presión refractarias a tratamiento, astenia, dolor crónico, insomnio, diarrea). Las variables cualitativas se compararon con test de chi cuadrado y las cuantitativas con el test t de Student. Para estudiar las variables asociadas con el uso de ACO se realizó un análisis multivariante con un test de regresión logística y para estudiar aquellas asociadas con la supervivencia se realizó un test de regresión de Cox.
Resultados: En el estudio PALIAR se incluyeron 1.778 pacientes con enfermedades médicas no neoplásicas en fase avanzada y de ellos 645 (36,3%) tenían FA. Se encontraban en fase terminal 315 (48,8%) pacientes, que fueron los finalmente incluidos en este análisis. La edad media fue de 82,6 (7,0) años y 183 (58,1%) pacientes eran varones. La enfermedad médica no neoplásica en fase avanzada era cardiaca en 173 (54,9%) pacientes, respiratoria en 111 (35,2%), renal en 43 (13,6%), hepática en 14 (4,4%) y neurológica en 151 (47,9%). La puntuación media en la escala CHADS2 fue 3,4 (1,2). El riesgo embólico fue bajo en 1 (0,3%) paciente, moderado en 15 (4,8%) y alto en 299 (94,9%). Los pacientes tratados con ACO eran de menor edad [80,8 (6,3) vs 83,6 (7,2); p = 0,0005], tenían mejor situación funcional según el índice de Barthel [39 (33) vs 21(25); p = 0,0003)], menos delirium [16,1% vs 33,2%; p = 001], y padecían con más frecuencia enfermedades cardiacas (p < 0,0001), respiratorias (p = 0,005) y neurológicas (p < 0,0001). También recibían más tratamiento con diuréticos (88,4 vs 74,3%; p = 0,003) y betabloqueantes (37,5 vs 26,7%; p = 0,047). No había diferencia en el CHADS2 [3,4 (1,2) vs 3,4 (1,3); p = 0,542]. En el análisis multivariante solo la edad [0,96 (0,93-0,99; p = 0,046] y el índice de Barthel [1,01 (1,00-1,02; p = 0,03] se asociaron de forma independiente con la prescripción de ACO. Al cabo de 6 meses fallecieron 160 (50,8%) pacientes. Los pacientes fallecidos padecían con más frecuencia enfermedades cardiacas, respiratorias o neurológicas, presentaban más delirium, tenían peor situación funcional (Barthel), recibían con menos frecuencia ACO y calcioantagonistas, tenían con frecuencia caquexia y ulceras por presiones refractarias. No había diferencias en la puntuación CHADS2. Los factores asociados de forma independiente con la mortalidad fueron la caquexia [1,90 (1,17-3,11; p = 0,01], el delirium [1,86 (1,32-2,62; p = 0,0004], el índice de Barthel [0,99 (0,98-0,997; p = 0,01] y el uso de calcioantagonistas [0,58 (0,37-0,93; p = 0,02].
Conclusiones: En pacientes con enfermedades médicas no neoplásicas en fase avanzada y FA que están en fase terminal el uso de ACO no se asocia con beneficios de supervivencia.