EA-046 - ESTUDIO SOBRE LA CORRECTA LIMITACIÓN DEL ESFUERZO TERAPÉUTICO EN PACIENTES FALLECIDOS EN MEDICINA INTERNA
Medicina Interna. Complejo Asistencial Universitario de León. León.
Objetivos: Determinar las características de los pacientes que fallecen en Medicina Interna, y analizar las medidas adoptadas en los que se limita el esfuerzo terapéutico.
Material y métodos: Estudio observacional y retrospectivo. Se revisaron los informes de “exitus “de los pacientes fallecidos en el Servicio de Medicina Interna del Complejo Asistencial Universitario de León (CAULE) durante los meses de enero y febrero de 2016. Se realizó el análisis estadístico con el programa SPSS v 20.
Resultados: Hubo 87 pacientes que fallecieron. 55 hombres (63%) y 32 mujeres (37%). La edad media es de 81 ± 26 años (29-97). Destacar que 63 pacientes (72%) tienen más de 85 años. La causa de muerte más frecuente fue la infecciosa (49%) y fue la misma que motivó el ingreso en 58 (67%). La mediana de días hasta el exitus fue de 6 (0-57). En los antecedentes personales predominan las patologías cardio-respiratorias y neurológicas. Unas 3/4 partes de los pacientes tomaban más de 5 fármacos, el 25% eran grandes polimedicados. Las familias fueron informadas del mal pronóstico a corto plazo en el 67% de los casos, sin apreciar diferencias entre grupos de edad o causa de la muerte, si bien, llama la atención la falta de información en el grupo de causa cardiovascular (17 vs 41, p 0,06). Se pautó tratamiento con intención curativa en 67 pacientes (77%). En 17 se realizó sedación paliativa con morfina y midazolam, retirando el resto de medidas a 16 (p < 0,01). De los 17 a los que se les pautó midazolam y morfina, a 15 se les informó del mal pronóstico a corto plazo. De los 29 pacientes que fallecieron en las primeras 72h (los que estaban clínicamente peor al ingreso), cabe destacar que pese a informar a los familiares de mal pronóstico tan solo se retiró tratamiento con intención curativa a 5 de ellos.
Discusión: El final de la vida en Medicina Interna es una situación que vivimos en nuestra práctica clínica diaria. La decisión de sedación paliativa la toma el clínico junto con los familiares y en menos ocasiones con el paciente. Y no siempre se realiza de forma adecuada. Vemos que no se informa del mal pronóstico en algo más del 30% de los casos y especialmente si la causa es de origen cardiovascular en una muestra representativa de los pacientes que ingresan en Medicina Interna y que se caracteriza por edad avanzada, comorbilidad y polifarmacia. A pesar de ello en muchos falta una valoración pronostica que facilite una información adecuada al entorno familiar del paciente. En 16 de los 87 pacientes (menos del 20%) que fallecieron se pautaron unas medidas terapéuticas correctas en cuanto a sedación y retirada de tratamientos innecesarios, en el resto no se hizo e incluso en aquellos pacientes que ingresan en mala situación y que fallecen en las primeras 72 horas se les suele mantener el tratamiento curativo. El fármaco de elección en estas circunstancias es la morfina que se utiliza en el 58% de los pacientes.
Conclusiones: Es necesaria una reflexión en la forma de actuar en estas circunstancias que pasa por una valoración sobre la gravedad de cada paciente, una adecuada información a las familias (y en ocasiones a los pacientes) y una correcta limitación del esfuerzo terapéutico.