859 - EL IDIOMA EN QUE ME SANAS: UN ESTUDIO 360º DE LA SENSIBILIDAD LINGÜÍSTICA Y COMUNICACIÓN CLÍNICA EN UN SERVICIO DE MEDICINA INTERNA DE UNA COMUNIDAD BILINGÜE
Complexo Hospitalario Universitario de Santiago, Santiago de Compostela, España.
Objetivos: El presente trabajo pretende analizar la concordancia lingüística entre usuarios y profesionales de la salud y su consciencia lingüística (language awareness), definida como la sensibilidad de una persona hacia la naturaleza del lenguaje y su función en la vida humana, en la práctica y comunicación clínicas.
Métodos: Se diseñaron y administraron cuestionarios específicos para usuarios (pacientes y acompañantes) y profesionales (residentes, especialistas, enfermeros y auxiliares) de la planta de medicina interna de un hospital gallego. El estudio contó con la aprobación del Comité de Ética y se obtuvo el consentimiento informado de los pacientes participantes.
Resultados: De 102 registros, 63 fueron de profesionales El 46% tenía como lengua habitual el castellano, un 34,9% el gallego y un 19% ambas por igual. Un 68,3% de entrevistados respondieron que en general usaban con los pacientes la misma lengua en la que estos hablaban, mientras que un 22,2% de los profesionales se comunicaban preferentemente en su lengua habitual. Una mayoría significativa de profesionales consideraron la lengua en la que hablaban con los pacientes como algo importante en su práctica clínica (82,6%) y concordaron en que hablar la misma lengua que los pacientes beneficiaba la comunicación (92,1%), el vínculo paciente-sanitario (85,7%) y el manejo del paciente frágil (88,9%) y confusional (76,2%). Se observó una mayor tendencia (<.001) a adaptarse a la lengua del paciente entre los profesionales castellanohablantes (75,9%) y los que usaban ambas lenguas por igual (100%) que entre los gallegohablantes (40,9%). Se registraron respuestas de 39 usuarios (28 pacientes y 11 acompañantes). El 64,1% de estos indicaron como lengua habitual el gallego (75% entre los pacientes); solo un 5,1% de los pacientes provenía de fuera de Galicia. Un 87,2% de los usuarios valoraron positivamente que el sanitario hablase en la misma lengua que el paciente y un 97,4% afirmaron que al hablar de su salud se explicaban mejor en su lengua habitual. Asimismo, compararon un hipotético sanitario que concordase con el idioma del paciente y otro que no en base a una serie de variables: un 61,5% puntuaron más al profesional concordante en la variable de proximidad, 51,3% en la de profesionalidad, 64,1% en comprensión y 56,4% en confianza. En general, los acompañantes tendieron a otorgar más importancia a la concordancia lingüística que los pacientes.
Conclusiones: El presente trabajo ofrece una primera aproximación científica al papel del idioma que empleamos con los pacientes en la práctica clínica en un contexto plurilingüe como el español. Nuestros datos reflejan un alto grado de consciencia lingüística entre los profesionales entrevistados que se traduce en una actitud lingüística predominantemente concordante. Entre los usuarios se registró también un alto nivel de consciencia lingüística, con actitudes ampliamente favorables a la concordancia lingüística, aunque con datos más dispares. Finalmente, la baja proporción de pacientes castellanohablantes y de fuera de Galicia, el sesgo de deseabilidad social y la naturaleza cerrada del cuestionario se identificaron como las principales limitaciones del estudio.
Bibliografía
1. Irvine et al. Communicative sensitivity in the bilingual healthcare setting: a qualitative study of language awareness. J Adv Nurs. 2006;53(4):422-34.