748 - SÍNDROME POS-COVID: CARACTERÍSTICAS DE LOS PACIENTES Y EVOLUCIÓN CLÍNICA DURANTE EL SEGUIMIENTO EN UNA CONSULTA MONOGRÁFICA
Hospital General Universitario Gregorio MaraÑÓn. Madrid.
Objetivos: Algunos pacientes que superan la infección por SARS-CoV-2 presentan síntomas persistentes en el tiempo meses después del cuadro inicial. A día de hoy no hay un consenso sobre la definición de COVID persistente, también denominado long COVID. El objetivo de este trabajo es describir las características de los pacientes que desarrollan COVID persistente.
Métodos: Para este estudio observacional prospectivo seleccionamos a pacientes atendidos en nuestra unidad de seguimiento post COVID que persistían con dos o más de los síntomas típicos pasados tres meses de la infección, tras haber descartado una enfermedad subyacente alternativa.
Resultados: Se revisaron 214 pacientes. De ellos, 74 (46,7%) cumplían con los criterios establecidos. La edad media fue de 54,9 años (DE ± 12,7). El 67,6% eran mujeres. La etnia caucásica (63,5%) fue la más prevalente seguida de la latina (28,4%). Entre los antecedentes personales el 23% tenía hipertensión arterial, el 25,7% dislipemia y el 13,5% diabetes mellitus. El índice de masa corporal medio fue de 28,15 (DE ± 5,18). El 81,1% había requerido hospitalización, con una estancia media de 16,22 días (DE ± 12,5). Un 25% de los hospitalizados requirieron ingreso en UCI, y de estos el 53,3% necesitaron intubación orotraqueal. Adicionalmente, un 10% de estos pacientes precisaron ventilación mecánica no invasiva u oxigenoterapia de alto flujo en planta. El 66,7% de los hospitalizados desarrollaron síndrome de distrés respiratorio agudo, y un 20% de ellos necesitaron oxigenoterapia domiciliaria de forma transitoria, retirándose en todos los casos a las pocas semanas. El 85% de los ingresados continuaban teniendo afectación radiográfica bilateral al alta. La tasa de reingresos fue del 5%. Un 27% de los pacientes consultó en urgencias en los meses siguientes al cuadro agudo, más de la mitad (55%) por síntomas relacionados con COVID persistente. Los síntomas referidos con mayor frecuencia durante el seguimiento fueron disnea de esfuerzo (43,2%), síntomas neuropsiquiátricos (35,3%) que incluían dificultad de concentración, insomnio, depresión o ansiedad; mialgias (33,8%), artralgias (27%), dolor torácico atípico (29,7%) y cefalea (27%). Los infiltrados radiológicos se resolvieron en la mayor parte de los pacientes, quedando afectación residual solo en un 2,7% más allá de 6 meses. Se realizaron pruebas de función respiratoria al 27% de los pacientes, siendo normales en un 60%. Las medias de presión inspiratoria y espiratoria máximas fueron de 64,14 (DE ± 12,35), y 61,43 (DE ± 16,79), respectivamente. En la TC torácica tan solo seis pacientes mostraron imágenes sugestivas de fibrosis residual secundaria a la bronconeumonía por SARS-CoV-2.
Conclusiones: Los datos de nuestro estudio son coherentes con lo publicado en la literatura. La mayoría de los pacientes con COVID persistente son mujeres de edad media. Las alteraciones analíticas y radiológicas tienden a resolverse persistiendo sintomatología variada cuya base fisiopatológica no está bien caracterizada todavía y la disnea residual tiene un componente importante de debilidad muscular demostrado en las pruebas de función respiratoria. La elevada proporción de pacientes hospitalizados y con curso grave en nuestra cohorte se explica por la derivación prioritaria a esta consulta de este tipo de pacientes de cara a asegurar su correcto seguimiento.
